El 4 de Diciembre, los 4 meses de la Era del Apocalipsis.

Con lo críticos que éramos con estas etapas y los crossovers y bla, bla, bla… al final con el paso de los años tengo esto muy arriba en el recuerdo, qué buen disfrute dio el dibujo un Joe Madureira @joemadx que estaba a tope.

Durante cuatro meses todas las series de mutantes se cancelaron, tras el viaje al pasado de Legión (hijo de Charles Xavier) para matar a su archienemigo Magneto, pero matando a su padre por error… y ¡PUM! paradoja temporal… la línea temporal oficial Marvel (Tierra-616) deja de existir a partir de ese momento y continuamos en una nueva… en la que, sin Xavier, sin los mismos X-Men, nadie estaba ahí para impedir que Apocalipsis tomara al mando, ni para restaurar el cristal M’Kraan, nexo de todas las realidades.

Este cristal tiene que ser restaurado en todas las realidades que existen, o todas las realidades serán destruidas. Esto estaba cogido un poco con pinzas, ¿eh? ¿En ninguna realidad ha pasado? Vaya, vaya…

Al final se consigue salvar el multiverso sobre la bocina, algunos personajes saltan a la realidad “oficial” que es restituida, y todo cambiará para seguir siendo igual. Carrusel de emociones.

Alucinancia al 120% por el mero hecho de molar.

Aprovechando el ratito que nos queda del año, os traigo la obra cumbre de @joemadx en todo su esplendor. Aquí no vengáis a buscar guiones deslumbrantes y sorprendentes, con giros apasionantes y argumentos sesudos, o con tramas dentro de tramas a lo Inception. No no no. Aquí se viene a ALUCINAR con los lápices de este señor…

Battle Chasers fue el buque insignia (junto a otro par de obras que traeré más adelante), de lo que supuso la segunda gran espantada de estrellas a los lápices en los cómics americanos de las grandes editoriales, y que supuso la creación del sello Cliffhanger.

Un argumento de fantasía al uso pero con personajes a cada cual más molón y con un arte que, para mi gusto, es de lo mejorcito que salió de los 90 y que por otra parte, para nuestra desgracia, quedó inconcluso.

Y es que la afición por desarrollar videojuegos del autor es proporcional a su capacidad para dibujar, así que acabó enfocando ahí sus esfuerzos, tiempo y dinero hasta el punto de que este año ha publicado la “continuación” en forma del videojuego Battle Chasers Nightwar a través de su estudio @airshipsyndicate.

Siendo egoísta he de decir que, como suele decirse en estos casos, “todo gran poder conlleva una gran responsabilidad”… y siendo capaz de dibujar cómics a este nivel alguien debería secuestrar a este señor y atarle a una mesa de dibujo a hacer cómics. Pero si os interesa saber como continua la historia, es lo que hay. Es una pena, pero al menos podemos seguir disfrutando de su arte.

¡Y qué arte!

(@hecdruiz)